Rompiendo la Depresión

“Cómo sanar tu corazón y tu mente y vivir en perfecta paz”

Jesús dijo ~ ‘No se turbe vuestro corazón’, hoy veremos cómo vivir libres de depresión. La depresión se ha convertido en el flagelo de nuestra sociedad moderna, donde la gente es diariamente forzada a confrontar depravación y traición moral, desintegración familiar, mientras están siendo bombardeados con un desorden social materialista e inhumano conducido por el mercado libre del capitalismo. Vivimos en un mundo insensible de ‘perro come perro’, y cuando llega la hora de la verdad, pasa factura en la forma de una miríada de trastornos psicológicos y emocionales, derivados de una ansiedad profundamente arraigada y, como Cristo lo llamó, ‘corazón quebrantado’. El hombre fue creado a la imagen¹ de Dios, y dios es amor. El hombre no fue creado para vivir en un mundo de egoísmo, odio, confusión y decepción. La Biblia no está muda en este tema. De hecho, Jesús incluyo la sanidad a los quebrantados de corazón y la libertad a los cautivos como dos de Sus cinco metas capitales de su ministerio. En su primer mensaje en su ciudad natal de Nazaret, Jesús predico un corto mensaje en los inicios de su ministerio, el cual muchos consideraron como la “Declaración de su Misión.”

Sanación del alma y el espíritu

Jesús dijo, “El Espíritu del Señor esta sobre mí, por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres, me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón a proclamar libertad a los cautivos y recuperar la vista a los ciegos, a liberar a aquellos que están oprimidos” (Lucas 4.18). La palabra “opresión” aquí debe ser entendida como un sinónimo del término moderno “depresión”. De hecho, actualmente sería correcto decir que una persona deprimida está siendo “oprimida.” La ciencia moderna no puede tocar el problema real con terapias (drogas) psicológicas o psiquiátricas porque el problema está enraizado en la condición interna del espíritu y el alma humana. Curar la depresión pudiera ser certeramente llamado “Curar la depresión podría llamarse con precisión ‘la curación del alma y el espíritu del hombre’, que solo puede lograrse mediante la integración adecuada de las verdades eternas del Príncipe de Paz, Jesucristo.. “La congoja en el corazón del hombre lo abate, más la buena palabra lo alegra” (Proverbios 12.25).

La libertad de la verdad

Si la verdad os hará libres, una verdad parcial os dejará esclavizados y desilusionados. Jesús dijo que vino a ~ “…sanar a los quebrantados, proclamar libertad a los cautivos y recuperar la vista a los ciegos, para liberar a aquellos que están oprimidos [ deprimidos] (Lucas 4.18) Hay un protocolo muy simple, el cual cuando es entendido y practicado correctamente, cualquier persona puede vivir libre del tormento de la depresión. La ciencia secular fue al menos parcialmente correcta al identificar que la raíz del problema está en la mente. Suficiente psicoterapia y/o meditación eventualmente proporcionará algún grado de alivio; sin embargo, la libertad y la paz nunca se harán realidad a diario hasta que se comprenda y se desarrolle una comprensión precisa de la composición humana. Jesús describió el estado humano del ser como una interacción continua entre cuatro partes integrales: espíritu, alma, mente y cuerpo. ~ “Y amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas” (Marcos 12.30).

Transformación

Las grandes farmacéuticas quebrarían, la depresión terminaría y toda enfermedad mental se convertiría en cosa del pasado en el momento en que uno aplique la primera y única ley que Dios le dio al hombre mientras estaba en el paraíso, el Edén. El único requisito necesario para que el hombre regrese al paraíso es el mismo hoy que en el principio. Lo único que Dios ordenó no hacer fue comer del ‘Árbol del conocimiento’ ~ “Mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás” (Gen. 2.17). Todo el dolor, la ansiedad, la enfermedad y el sufrimiento son hasta el día de hoy el producto de participar de la mente, el árbol del conocimiento. Incluso la ciencia moderna, la meditación y la espiritualidad prueban que esto es cierto. En el momento en que uno se da cuenta de que es espíritu y comienza a cerrar la mente; la fuente de confusión, tormento y dolor; aunque no sea un cristiano nacido de nuevo, encontrará algún grado de paz y bienestar.

La guarida de la serpiente

Dios le dijo a Adán que no necesitaba conocimiento mental. Mientras Adán vivió y caminó por el intelecto superior de su espíritu, tuvo comunión con Dios, abundancia y vida eterna a su disposición. Desde el principio, la morada de la serpiente fue la mente (árbol de ciencia), y al hombre se le ordenó vivir y operar en la insuperable inteligencia del espíritu. Se nos dice que caminemos y vivamos³ en el espíritu, y la única razón por la que un cristiano no hace esto automáticamente es porque el silbido constante e histérico de la serpiente en su mente lo ha hipnotizado y lo está volviendo absolutamente y literalmente loco. El Apóstol Pablo lo expresa de esta manera ~ “Porque el ocuparse de la carne [es] muerte, pero el ocuparse del espíritu es vida y paz” (Rom 8.6). No es tanto el grado en que has estado abusando de tu mente como el grado en que tu mente te ha estado abusando. Según Paul, literalmente te está matando, la muerte por mil latigazos, también conocida como depresión.

Se necesita un poco de práctica al principio, pero el hecho es que no eres tu mente. Primero, a través de la oración, la meditación silenciosa y la palabra de Dios; Comenzamos a distinguir entre la mente del espíritu y la mente de la serpiente, el mentiroso. Entonces, comienza a llevar todo pensamiento⁴ cautivo a Jesucristo, la palabra de Dios,⁵ y la depresión se romperá en tu vida para siempre.

Isaías 26.3

Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado.

Notas

1. Génesis 1.26, 1 Juan. 4.8)

2. Mark 12.30

3. Gálatas 5.25

4. 2 Corintios 10.5

5. Juan 1.14

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© L. Jonathan Blais 2023 Todos los derechos reservados. Escritura tomada de La Santa Biblia Reina Valera 1960 © Sociedades Bíblicas en América Latina 1960. Usado con permiso.