Los hombres que Dios ha elegido mostrar en la Biblia fueron todos hombres que habían experimentado una transformación asombrosa. Esta es la materia de la verdadera vida cristiana. Todos los que conocen a Dios y caminan en la comunión, como Sansón, Moisés y Elías, se convertirán en figuras más grandes que la vida a través de la regeneración espiritual. En el Antiguo Testamento, se trataba de la Ley de Moisés. Ahora, en el Nuevo Testamento, se trata de las promesas por las cuales a través de la fe somos transformados en “participantes de la naturaleza divina.” ~ “Nos han sido dadas por su divino poder… nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina” (2Pedro 1.3,4). Dios ha provisto más de 2,000 promesas en la Biblia para que Sus hijos siempre tengan todo lo necesario para vencer cada táctica del enemigo. Hay quienes continúan orando las mismas oraciones una y otra vez pidiéndole a Dios lo mismo, sin saber que Dios ya ha escuchado su oración y les ha concedido las cosas que han pedido.
Dios siempre da
Echemos un vistazo a lo que la Biblia dice sobre la oración en el libro de Santiago. ~ “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada. Pero pida con fe, no dudando nada; porque el que duda es semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento y echada de una parte a otra. No piense, pues, quien tal haga, que recibirá cosa alguna del Señor” (Santiago 1.5-7). Tenga en cuenta que el Apóstol comienza usando la “sabiduría” como ejemplo, y él procede a aplicar lo que está diciendo a todas las cosas, cuando dice ~ “…No piense, pues, quien tal haga, que recibirá cosa alguna del Señor.” Entonces, no se trata solo de sabiduría, sino de “todas las cosas” que se hacen en oración. Ahora, note que dice que Dios siempre da a todos los hombres “liberalmente”. ~ “…Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada” (Santiago 1.5).
Ya dado
Dios siempre da a todos los que piden con fe. Es por eso que el Apóstol continúa decididamente que Dios siempre da a todos los hombres cuando piden con fe. Note, entonces él dice incondicional y resueltamente ~ “… y le será dada” (Santiago 1.5). La razón por la cual todas las cosas que le da al hombre ya se dan, es porque deben ser recibidas “POR FE”. La fe es la única condición necesaria. Una vez que una persona recibe por fe, está calificado y bendecido por Dios porque ha cumplido la condición espiritual, que es recibir por fe. Esta es la única condición espiritual necesaria para recibir todas las promesas de Dios. Note, la Biblia dice lo mismo otra vez en el libro de 2 Pedro ~ “Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas… por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas” (2Pedro 1.3-4). Él dijo, todas las cosas ya han pasado por las promesas. Todo lo que Dios requiere del hombre es recibir las promesas por fe. ~ “A fin de que no os hagáis perezosos, sino imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas” (Hebreos 6.12).
Reciba lo que Dios ha dado
Ahora, lo único necesario es recibir lo que Dios ha dado. El problema no es que Dios no escucha nuestras oraciones o no se preocupa por nosotros. Se preocupa tanto por nosotros que nos ha concedido nuestras peticiones incluso antes de que las hayamos pedido. ¡Está bien! la Biblia dice, “Y antes que clamen, responderé yo; mientras aún hablan, yo habré oído” (Isaías 65.24), y San Pedro escribe, “Todas las cosas que pertenecen a la vida y la piedad nos han sido dadas” (2Pedro 1.3). La solución es conocer primero las cosas que Dios ya ha dado y luego entiende cómo a recibirlas de Dios por fe. El siguiente paso es dejar de pedirle a Dios las cosas que ya ha dado, identificar las cosas que son necesarias, y luego aprender cómo recibirlas por fe. El apóstol Pablo escribe, “Porque todas las promesas de Dios son en él Sí, y en él Amén” (2Corintios 1.20).
Transformación Divina
Todo lo que está en las promesas de Dios ya ha sido dado. Una vez que el hijo de Dios conoce las promesas de Dios, puede dejar de pedirle a Dios las cosas que ya se han dado y comenzar la tarea de “recibir” por fe. Sansón quedó tan transformado por el poder del Pacto de Dios que ya no estaba sujeto a las leyes naturales de la física. Las Escrituras describen claramente a dos Sansones: uno completamente transformado en un superhéroe más grande que la vida y, aparte de la fe en la promesa, solo un don nadie religioso débil, vacilante. Tu decides. Dios ha puesto el poder de la transformación divina en tus manos.
Hebreos 6.12
A fin de que no os hagáis perezosos, sino imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas.
© L. Jonathan Blais 2021 Todos los derechos reservados. Escritura tomada de la La Santa Biblia Reina Valera© 1960. Usado con permiso.